El Presidente de la República, Rodrigo Chaves, ha abordado recientemente la inquietante posibilidad de ataques dirigidos contra su oficina en la casa presidencial, así como su residencia en Monterán, Curridabat. Estas declaraciones se producen en el contexto de rumores alimentados por el abogado General Carlo Díaz y la Agencia de Investigación Judicial (OIJ), que han suscitado preocupación en el ámbito político y social del país.

La inquietud se intensificó luego de que las redes sociales comenzaran a circular información insinuando una supuesta intención de demolición o “pavimentación” de la zona en Zapote, un atentado a la tranquilidad política del país. Chaves, en respuesta a tales afirmaciones, apeló a la serenidad y el entendimiento, haciendo un llamado a evitar confrontaciones innecesarias. “Te digo: no tires de la cola hasta la ternera. Mantenga la paz, quiero la paz”, expresó el presidente, dejando claro su deseo por un ambiente de calma y diálogo en momentos de incertidumbre.

El mandatario también reflexionó sobre el proceso electoral venidero, subrayando que desea que esta etapa sea polémica e interesante. “La campaña está en mi contra, que no estaré en la boleta. ¿Qué no tienen nada que ofrecer?” cuestionó, lo que indica su percepción de una falta de ideas frescas y propuestas significativas por parte de aquellos que se oponen a su administración. Chaves no fue tímido al criticar el trabajo del poder judicial, instando a que sus recursos sean mejor utilizados en acciones que realmente beneficien a la ciudadanía.

“El poder judicial no tiene una sola ley que proponer?” se preguntó, en una clara alusión a su descontento con la labor de este órgano. Su aprecio por el sistema judicial es evidente, pero también su preocupación por la capacidad de este para actuar con valentía y dirección. “Me encanta el poder judicial, me preocupa que la gente sea valiente contigo. Quiero que este país permanezca en paz, en la democracia”, sostuvo, reafirmando su compromiso con un entorno democrático.

Chaves hizo énfasis en que la acusación en su contra se presenta “como si fuera el candidato”, lo que trae consigo una carga de tensión ya que en su opinión, se está buscando desestabilizar su imagen pública. “Tengamos paz, no para que mucha gente dibuje los huevos: al jaguar, a la gente …”, instó, sugiriendo que hay fuerzas interesadas en fomentar el caos y la división en la opinión pública.

Este intercambio ocurre justo un día después de que se desataran ciertos ataques relacionados con lo que se ha denominado un caso de seguimiento oscuro. Entre los involucrados en este escándalo, destacan el exministro de MOPT, Mauricio Batalla, y el presidente de CNE, Alejandro Picado, quienes fueron detenidos al tratar de formalizar una decisión de emergencia por un contrato exorbitante de más de $40 millones destinado a recuperar el rastro del aeropuerto Daniel Oduber en Liberia.